Verticales de niebla
Una mirada en blanco y negro a las palmas de San Félix
Entre las montañas del norte de Caldas, las palmas de cera se alzan como guardianas del silencio. En San Félix, la luz y la niebla dibujan un paisaje suspendido, donde cada palma parece una línea trazada entre la tierra y el cielo.
Esta serie en blanco y negro busca capturar no solo la forma de estos árboles monumentales, sino también su quietud, su misterio y su profunda conexión con el territorio.
No hay color, pero hay atmósfera. No hay estridencia, pero sí presencia.
Una contemplación lenta, vertical, de un paisaje que se deja habitar en sus sombras.







